10 ideas de refrigerios saludables para niños que no tienen un sabor saludable

¿Siente a veces que hacer que su hijo coma refrigerios nutritivos es imposible? Bueno, con los alimentos y las recetas correctos, puede crear bocadillos saludables para niños que sean tan sabrosos que sus hijos ni siquiera se darán cuenta de que están comiendo algo bueno para ellos.

“Hacer que los niños coman alimentos saludables tiene que ver con repensar los ingredientes”, dice Laura Fuentes, creadora del sitio de recetas para niños MOMables y autora de “The Best Homemade Kids’ Snacks on the Planet”. ¿El truco? Use ingredientes saludables, pero prepárelos de una manera adecuada para los niños. “En lugar de brócoli al vapor, por ejemplo, pon brócoli en una pizza”, explica Fuentes.

Pruebe estos 10 refrigerios deliciosamente buenos para usted y haga que la lonchera de sus hijos o las opciones de refrigerios después de la escuela sean irresistibles.

1. Congele paletas saludables

“Las paletas heladas parecen una delicia, pero en realidad pueden ser saludables cuando las haces en casa con frutas frescas y yogur”, explica Fuentes. Invierta en algunos moldes para congelar y sea creativo con las frutas. Estas paletas de yogur con sabor a fruta o las paletas de chocolate con aguacate de MOMables son fáciles de preparar y saben muy bien, y están llenas de ingredientes saludables ricos en antioxidantes. ¡También son fáciles de sacar del congelador para un refrigerio saludable sin necesidad de preparación!

2. Haz que la hora de la merienda destaque

“¡Las palomitas de maíz son un delicioso refrigerio integral que a los niños les encanta personalizar!” dice la entrenadora culinaria Samantha Barnes, fundadora y directora ejecutiva de Raddish Kids. Omita la variedad de microondas cargada de conservantes y prepare la suya en solo unos minutos con una máquina para hacer palomitas de maíz o en la estufa. Luego, deje que los niños agreguen sus propios aderezos y mezclas, como queso parmesano, arándanos secos o condimentos secos.

3. Construye un bento mejor

“Ofrecer porciones más pequeñas y una variedad de opciones son excelentes maneras de alentar a los comedores quisquillosos a probar alimentos más saludables”, dice Jenna Rammell, cofundadora del blog Small Fry. Coloque pequeños artículos saludables, como verduras picadas, frutas o un puñado de nueces en cajas de bento compartimentadas. Los niños se emocionarán al comer todas las diferentes secciones, explica Rammell.

4. Rebanar chips de camote

Si tiene un amante de las papas fritas en sus manos, omita la freidora e intercambie ingredientes nutritivos como batatas o manzanas, que están llenos de vitaminas. Estos chips de boniato horneados de Small Fry llenarán esos antojos de chips mientras aportan un toque nutritivo. Si tienes una freidora, prueba esta receta de freidora de camote de The Tipical Mom.

5. Oferta fresca fruta

La fruta ofrece a los niños un dulce regalo, pero no saben lo nutritivos que son en realidad esas fresas y arándanos. Fuentes sugiere mezclar un tazón de bayas frescas con yogur para un refrigerio simple y saludable (¡pero dulce!).

6. Recarga energías con batidos

Los batidos ofrecen una forma sabrosa de colar frutas y verduras que su hijo no probaría de otra manera. Cuando se hacen en casa, los batidos se pueden rellenar con frutas frescas y verduras de hojas verdes oscuras, dice Barnes. “Una merienda favorita después de la escuela en nuestra casa es nuestro Super-Power Milkshake, hecho con bananas congeladas, leche, col rizada, cacao en polvo, mantequilla de maní y un chorrito de agave”, explica. Haga su propio "malteado" con frutas y verduras congeladas para que sus hijos ingieran vitaminas en poco tiempo.

7. Prepara helado de plátano

Sí, el “helado” puede ser saludable, cuando en realidad no es helado. La textura y el sabor de esta receta de "helado" de plátano congelado de un ingrediente de Kitchen Counter Chronicles es tan similar al helado real que sus hijos apenas notarán que simplemente están comiendo puré de frutas.

8. Vuélvete loco con el yogur

Si los paquetes de refrigerios son un indicador, los niños se sienten atraídos por los refrigerios divertidos y coloridos. Aprovecha eso con estos puntos de yogur helado de Lady Behind the Curtain. Tus hijos se divertirán preparando (y comiendo) este postre con todos los beneficios nutricionales del yogur natural.

9. Empezar a sumergir

Las salsas compradas en la tienda como el hummus y el guacamole son un refrigerio rico en proteínas que mantendrá a los niños satisfechos por más tiempo y será menos probable que estén mordisqueando constantemente. “¡A los niños les encanta sumergirse!” dice Fuentes. “Y las salsas sabrosas son una excelente manera de colar verduras”. Ofrezca verduras como palitos de zanahoria para mojar en el hummus o rodajas de pepino para mojar en guacamole.

10. Barras de granola

Algunos refrigerios que a sus hijos ya les encantan, como la granola y las barras de proteínas, pueden parecer una opción saludable, pero muchos están cargados de azúcar y otros ingredientes procesados. Ofrezca a los niños los sabores que les encantan con un toque más saludable haciendo su propia variedad con ingredientes saludables. Comience con estas barras de granola sin hornear de cinco ingredientes de Minimalist Baker y personalícelas con los complementos favoritos de sus hijos.

La clave para lograr que los niños coman saludablemente es ofrecer solo opciones saludables, dice Rammell. Ofrezca continuamente opciones sabias de refrigerios, y muy pronto, el hábito sabio se convertirá en una segunda naturaleza.