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¿Los medicamentos para las convulsiones durante el embarazo podrían causar LD?

P Mi hijo está en tercer grado y tiene nueve años. Tiene problemas con las matemáticas, siempre se ha atrasado al menos un año en lectura y sigue teniendo dificultades para seguir los problemas planteados. Su maestra dice que algunos días le va muy bien, pero al día siguiente parece no recordar nada de lo que aprendió el día anterior.

Tengo 37 años y tengo un trastorno convulsivo. Lo tengo desde que tenía 18 años. Mientras estaba embarazada de mi hijo, tomaba Dilantin y fenobarbital para controlar mis convulsiones. Sin embargo, no tuve ninguna convulsión mientras estaba embarazada. Mi pregunta es:¿piensa que alguno de los medicamentos que estaba tomando habría causado algo de esto y qué curso de acción deberíamos considerar? Hemos contratado a un tutor para el verano para ver si eso lo alcanza de alguna manera.

R No soy médico, por lo que le animo a que le pida a su neurólogo una respuesta médica a esta importante pregunta. Sé que medicamentos como el fenobarbital y, en particular, Dilantin pueden tener un impacto negativo en el desarrollo del feto. Los efectos de estos medicamentos se describen en un libro llamado Drugs in Pregnancy and Lactation por Briggs, Freeman y Yaffe. Esto significa que existen posibles efectos negativos en el bebé, que deben sopesarse frente al riesgo para la madre si no toma los medicamentos.

Elegí responder a su pregunta ya que muchas madres y padres de niños con problemas de aprendizaje se preocupan por si son responsables de alguna manera por los problemas que tiene su hijo. Es comprensible que los padres ansiosos y preocupados estén buscando una respuesta a la pregunta de por qué le sucedió esto a su hijo. Como parte de esta búsqueda, se preguntan si algo que tomaron o no tomaron, o hicieron o dejaron de hacer mientras estaban concibiendo o durante el embarazo, es la causa del problema. Creo que ayuda tener una respuesta a esta pregunta, ya que puede ayudar a los padres a seguir adelante y planificar para su hijo. Sin embargo, la realidad es que no hay una respuesta clara o, en el mejor de los casos, la respuesta es tal vez.

Lo importante aquí es que los padres no deberían pasar mucho tiempo preocupándose por lo que hicieron o podrían haber hecho de manera diferente. Lo que cuenta es asegurarse de que haya una buena evaluación exhaustiva del estilo de aprendizaje de un niño. Si existe la duda de si un medicamento o droga causó daño cerebral en un niño o afectó su pensamiento, entonces se debe realizar una evaluación neuropsicológica integral. Lo sabemos, en gran parte gracias al trabajo de Byron Rourke, Ph.D. , un neuropsicólogo canadiense, que los niños con ciertos tipos de problemas de procesamiento pueden beneficiarse de tipos específicos de instrucción. Las pruebas neuropsicológicas analizan específicamente la forma en que funciona el cerebro y ayudan a identificar qué enfoques de enseñanza funcionarán mejor para un niño en particular. Simplemente debemos tener este tipo de información para decirnos qué métodos de enseñanza (o tutoría) funcionarán mejor. De lo contrario, es impredecible. La educación de los niños es demasiado importante para que confiemos en conjeturas, cuando tenemos la capacidad de ser más específicos. Pídale a su escuela que haga una remisión o hable con su pediatra al respecto.