Cómo calmar a un bebé que llora

Los gritos ensordecedores de un bebé pueden irritar al alma más dulce. También puede agravar la depresión posparto y comprometer la salud de la madre. Dado que los bebés son diferentes, los padres de más de un bebé pueden encontrar temperamentos extremadamente opuestos en sus hijos. Independientemente de sus personalidades, la mayoría de los bebés se calmarán con los siguientes consejos.

1. Succionar
Succionar relaja a la mayoría de los bebés y los tranquiliza, ya sea con el dedo, el chupete o la leche materna. Sin embargo, los dedos y los chupetes funcionan mejor cuando el bebé está bien alimentado y solo busca comodidad. Un bebé hambriento se sentirá frustrado al succionar cualquier cosa que no se esté llenando. Cuando un bebé tiene hambre o dolor, darle leche funciona mejor.

2. Columpiarse
Intente mecerse, balancearse o sacudirse de forma rápida y rítmica, lo que le recuerda al bebé los movimientos que experimentó en el estómago de su madre. El nivel de agitación de los bebés determina el vigor del movimiento necesario. Dicho esto, no sacuda al bebé con fuerza ya que es peligroso. Además, asegúrese de mantener su cabeza en una posición firme.

3. Desarrollar un patrón de sueño
Hacer que el bebé tenga una rutina ayuda tanto al bebé como al cuidador oa los padres a mantenerse cuerdos. El sueño juega un papel importante en el desarrollo de un bebé, así como en su estado de ánimo. Desarrollar una rutina para un bebé es una medida a largo plazo y es uno de los obstáculos de crianza más desafiantes. Sin embargo, los niños aprenden más rápido de lo que piensas. Los hábitos aseguran que los bebés duerman y jueguen lo suficiente, y un bebé más feliz se traduce en menos llanto.

4. Comprobación de cólicos
Los cólicos, que normalmente comienzan entre las 2 y las 16 semanas de edad, afectan al 26 por ciento de los bebés en distintos períodos. El llanto constante e inexplicable puede ser el resultado de gases, incomodidad o que el bebé simplemente esté tratando de lidiar con el mundo fuera del útero. Acueste al bebé boca arriba, sostenga ambas piernas y muévase con un suave movimiento cíclico.

Los estudios revelan que los bebés amamantados con cólico mejoran significativamente cuando las madres dejan de ingerir productos lácteos. Eso es común, especialmente en una familia con antecedentes de intolerancia a la lactosa y alergias.

5. Eructar después de comer
Si se pasa por alto, esta rutina genera mucha incomodidad en el bebé. Una vez que el bebé esté bien alimentado, sosténgalo en posición vertical y frótele suavemente la espalda. Repita suavemente hasta que eructe. Aunque este procedimiento ayuda con el reflujo, los casos graves pueden necesitar una receta médica. Eructar alivia la incomodidad y calma a los bebés.

6. Envolverlos
Una de las formas más efectivas de calmar instantáneamente a los bebés es "La sujeción". Este proceso de cuatro pasos, desarrollado por el Dr. Robert Hamilton, imita la posición del bebé en el útero.

Levante al bebé y cruce sus brazos sobre el pecho usando su mano para asegurar el pecho y la barbilla. Sostenga el trasero del bebé con la otra mano y colóquelo suavemente en un ángulo de 45 grados. Mece al bebé sacudiendo suavemente su trasero o moviéndolo lentamente hacia arriba y hacia abajo.

7. Salir
La naturaleza es amable y tiene un efecto calmante en los niños. Sacar a un niño que llora de la casa es terapéutico tanto para el cuidador como para el niño. Los colibríes, el susurro de las hojas y otras vistas, sonidos y olores naturales pueden distraer y calmar a los bebés. El movimiento y el aire fresco también ayudan a los bebés a estar tranquilos.

Una de las partes más difíciles de cuidar niños es tener que manejar a un bebé que llora. Con los consejos anteriores, puede tener un bebé tranquilo y ser un padre y cuidador feliz.

Consulte también: Llanto y cólicos de la Academia Estadounidense de Pediatría.